Soy un yonki de las emociones, no necesito notificaciones de un algoritmo basado en la respuesta de mi pulgar a lo que miro, prefiero tiempo contigo, escuchar tus momentos, en los que te has roto, en los que te has reído, sentir tu emoción en mi latido, en mi mente, olvidar el destino, o quizás no, ese marcado por la memoria y el pasado, mejorarlo, vivir en un café tus miradas, tus sentidos, porque la vida…. ¿Lo tiene?.
Lo he buscado y lo he perdido, lo he vuelto a buscar y lo encontré, me sentí vacío y encerrado en ese instante, ahora he salido, ya no busco, encuentro el equilibrio con lo que tengo, con lo que me das, con lo que llevo a la espalda, esa cantidad de notificaciones emocionales que te pueden dejar sin habla.